El anclaje de recursos en PNL, es una técnica para aumentar las opciones emocionales. Nuestra cultura, a diferencia de otras, cree que los estados emocionales son involuntarios, creados por circunstancias exteriores o por otras personas.
El universo puede repartirnos una variada mano de cartas, pero nosotros
podemos escoger cómo y cuándo jugarlas.
Como dijo Aldous Huxley: «La experiencia no es lo que le suceda a usted, sino lo que hace usted con lo que le sucede».
Las anclas, son asociaciones de ciertos estados de sensaciones interiores, con una acción física( leer mas en ANCLAS) y pueden encadenarse de forma que una lleve a otra.
Cada ancla forma un eslabón en la cadena que conduce al
siguiente, de la misma manera que el impulso eléctrico pasa de
un nervio a otro en el cuerpo.
De alguna forma, las anclas son un espejo exterior de cómo creamos una nueva ruta neuronal en el sistema nervioso entre una señal inicial y una nueva
respuesta.
Cambiar de anclas nos permite movernos por una secuencia de estados emocionales diferentes de forma fácil y automática.
El encadenamiento es particularmente útil si el estado emocional en que vivimos un problema es muy fuerte y el estado de recurso ( el estado de agrado y bienestar que nos gustaría vivir en vez de ese estado negativo) está demasiado alejado para alcanzarlo en un solo paso.
Por ejemplo, piense en una situación en que se sienta frustrado.
¿Puede identificar la señal estable que le trae este recuerdo?
¿Un tono de voz en su diálogo interior?
¿Una sensación en particular?
¿Algo que haya visto?
Puede parecer, a veces, que el mundo conspire contra usted, pero
puede usted cambiar su reacción frente a esta conspiración. Sobre todo considerando que si se mantiene en ese estado emocional negativo, en este caso ese sentimiento de frustración, no va a cambiar el mundo exterior y no resolverá nada.
Cuando tenga usted esta señal interna, decida a qué estado querría cambiar. ¿Al de curiosidad, quizás? ¿Y de ahí, al de creatividad?
Para poner en marcha la cadena, piense en un momento en que
fuera intensamente curioso y revívalo, puede que de manera
cinestésica ( o sea, sintiéndolo, como si lo reviviera ahora), tocándose la mano.
Cambie de estado, luego piense en un momento en que estuviera en un estado de gran creatividad y revívalo, tocándose otra parte de la mano, por ejemplo.
A continuación, vuelva a la experiencia frustrante, y tan pronto como tenga la señal de frustración, ponga en acción el ancla de curiosidad ( tocando nuevamente la mano) y, cuando el sentimiento de curiosidad alcance el punto culminante, active el ancla de la creatividad.( de la misma manera, tocando la mano en la otra parte).
Esto establece una cadena nerviosa de asociaciones que cambia fácilmente de la frustración a la creatividad, pasando por la curiosidad.
Practíquelo tantas veces como desee hasta que la conexión sea automática.
Una vez que pueda usted inducir, calibrar y anclar distintos estados emocionales, tendrá una herramienta tremendamente poderosa para apoyarse y para apoyar a otras personas si es terapeuta. Usted tendrá un acceso fácil y rápido a cualquier estado emocional.
El anclaje puede utilizarse si es terapeuta, para ayudar a que otras personas realicen cambios de forma notablemente rápida, y puede hacerse en cualquier sistema, visual, auditivo o cinestésico.

